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jueves, 1 de enero de 2015

Pavo al horno con naranja y almendras

Para la cena de ayer me apetecía hacer algo diferente, un poco sofisticado. Así que cuando vi esta receta, el otro día, en una revista (no recuerdo cuál era...) la apunté y me pareció perfecta. Yo nunca había hecho nada parecido, así que estaba temblando... La receta parecía muy fácil, pero podía quedar seco, crudo, que no estuviera a tiempo para la cena... Las típicas dudas de cuando haces una receta por primera vez, encima para invitar a gente (reconozco que era arriesgado) y el día de Noche Vieja, que el tiempo corre en tu contra.
 
Pero nada de todo esto. Efectivamente, la receta es sencillísima, y siguiendo los pasos fielmente, sale perfecta. A nosontros nos encantó, estaba en su punto y tardó en hacerse lo que decía, ni más ni menos. Aquí os la dejo. Es perfecta para un montón de ocasiones, o para comer en familia. Nosotros lo acompañamos de unas patatas asadas y un poco de ensalada que aportaba la frescura perfecta. De verdad, un plato, 100% recomendable.
 
 
 


Ingredientes:

1kg de pechuga de pavo
125g almendras laminadas
60g de miel
2 naranjas
1 pizca de canela en polvo
2 palitos de canela en rama
Aceite de oliva
1 vasito de vino  de Oporto
Sal y pimienta


Empezamos salpimentando la pechuga y regándola con un chorro de aceite de oliva virgen. Ponemos las dos ramitas de canela encima y la metemos al horno, que debe estar precalentado a 200º a asar. Le vamos dando la vuelta de vez en cuando y pincelando con el aceite.

Mientras tanto, hacemos una salsa con la miel, el vino, el zumo de media naranja, la canela en polvo y 100g de las almendras, que habremos picado anteriormente. Cuando hayan pasado 35 minutos desde que metimos el pavo al horno, echamos la mezcla y untamos bien la pechuga. Dejamos así otros 10 minutos y sacamos.

Para servir, tostamos las almendras que nos sobraron en una sartén sin aceite ni nada, y partimos la naranja y media que nos queda en gajitos. Cortamos el pavo... ¡¡y a morir del gusto!! Es un plato rico, sabroso y engorda poco. ¿Se puede pedir más?

 




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