Me gustan muchísimo esos sillones que no se avergüenzan de mostrar sus tripas, y el paso del tiempo por su piel. Dan muchísimo encanto, calidez y calidad a cualquier proyecto decorativo.Un abrazo y feliz findeFran
Me gustan muchísimo esos sillones que no se avergüenzan de mostrar sus tripas, y el paso del tiempo por su piel. Dan muchísimo encanto, calidez y calidad a cualquier proyecto decorativo.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz finde
Fran