Hace unos días os hablaba de Tierra del Agua, un hotel en Asturias al que tenía muchísimas ganas de ir y este fin de semana, por fin, nos lo hemos autoregalado. Llevábamos varias semanas muy agobiados, con mucho trabajo y horarios eternos, así que cuando mi cuñada nos dijo que tenía muchas ganas de que Julia se quedara a dormir con sus primos... Llamada a una de las abuelas para colocar a Covadonga y ¡¡reserva confirmada!!
Tierra del Agua es un hotel rural situado en la aldea de Caleao, junto al Parque Natural de Redes. Ya la carretera para llegar hasta allí, es una auténtica preciosidad. El primer tramo (desde Oviedo o Gijón) atraviesa la Cuenca Minera del Valle del Nalón, con los castilletes asomando entre las casas y las montañas. Una vez pasado Rioseco, la carretera discurre entre altas montañas y bosques de castaños, robles y avellanos. Ahora en otoño es una auténtica maravilla. Vacas, ovejas, pastores y el río acompañándonos todo el camino.
El pueblo de Caleo merece una paseo (no lleva mucho tiempo) y hay casas asturianas y horreos y cuadras y huertas y, al final del pueblo, Tierra del Agua.
Nosotros hemos pasado un fin de semana inolvidable. Nos trataron genial. Las instalaciones son una pasada, tuvimos la oportunidad de darnos unos masajes, hacer un circuito de spa, cenar en su restaurante, desayunar en la cama... ¿Se puede pedir más? Nosotros ya lo hemos decido, hay que hacer esto, como mínimo una vez al año, y os animo a que vosotros también lo probéis.
Esta era nuestra habitación y las vistas que teníamos desde el pequeño salón. ¿Os hacéis una idea?
Y esto es el Spa, antes de empezar a funcionar (abajo ya veis que el vapor acabó por tapar las vistas) y lo que se ve desde la sauna. Aluciante. Además te sirven una fría limonada natural para refrescarte durante todo el circuito; baño turco, ducha escocesa, sauna... Todo un lujazo.