Princesas

Desde que nació Covadonga no hemos vuelto a dormir una noche del tirón y, si yo ya soy un poco perezosa para ver pelis profundas, ahora más que nunca. Me quedo dormida en el sofá un día sí y otro también. Pero ayer, después de tragarme un película insufrible protagonizada por Diane Keaton, una comedia romántica ñoña, edulcorada y super previsible, empecé a ver, casi sin querer Princesas, de Fernando León de Aranoa. No tengo nada en contra de las comedias románticas, las hay preciosas y cada peli tiene su momento. Sin embargo, Princesas es otra cosa, es una de esas películas en las que piensas al día siguiente, que te ponen la piel de gallina, que te emocionan y te hacen sentir.

Las dos protagonistas, Candela Peña y Micaela Nevárez, hacen unos papelones. Aunque la película es un poco dura y se desarrolla en el mundo de la prostitución (con todo lo que ello implica) desprende una ternura, que se acaba conviertiendo en una auténtica historia de amor y amistad.

Me quedo con los diálogos y las reflexiones de Caye (su protagonista) que realmente parecen sacados de un cuento de princesas y con la interpretación de Candela Peña.